lunes, 25 de mayo de 2009

Aprendizaje en Cuerpo Ajeno

Dicen que hay dos manera de aprender: viendo la experiencia de los demás (modelamiento se llama en psicología) o en carne propia (aprendizaje directo). A mí me llama la atención cómo algunas cosas, sólo se pueden aprender de manera directa y parece que no bastasen los modelos para que uno interiorizara tal o cual comportamiento por las consecuencias que ve en los demás.

La hija mayor de Sarah Palin, Bristol Palin, invita a que antes de ser sexualmente activas, las señoritas adolescentes imaginen y vean lo difícil que es criar un hijo a esas edades .

Recordemos que el año pasado, cuando su madre tuvo su cuarto de hora de fama mundial por cuenta de su aspiración a la Vicepresidencia de los Estados Unidos, la noticia del embarazo de su hija mayor fue un suculento plato que se sirvió la prensa, en virtud de que en Sarah se pretendían encarnar valores como la unión familiar, la fidelidad, la sexualidad dentro del matrimonio, e ideas que en ese país y en el mundo se asocian con una línea conservadora.

Por supuesto que ese embarazo se tomó para intentar demostrar que esos valores son anacrónicos; no recuerdo un medio de comunicación tradicional que exaltara la valentía de esta señorita al respetar la vida de su hijo. En la portada de la revista que reseño, se le ve con su vestido de graduación de bachiller y su hijo. Admirable decisión; sin embargo, conviene resaltar mas allá de su valentía, las dificultades que está padeciendo al tener que trabajar, sacar adelante sus estudios y los demás desafíos propios de un niño de 6 meses de edad.

Cómo hacer para que nuestros jóvenes no tengan que aprender en su propia experiencia sino que con este modelo puedan apartarse de estas dificultades?

Creo que un primer paso es que desde pequeños experimenten las consecuencias de sus acciones y que asuman responsabilidades. La ecuación es sencilla para aplicarla a un adolescente: si tu cuarto está arreglado, si hay respeto hacia tus padres y tu familia y si hay un buen rendimiento académico, podemos conversar de permisos para tu vida social. Pienso que hay que balancear la exagerada carga de derechos existentes, con deberes y que nuestros niños aprendan que los derechos que no son vitales, se ganan cumpliendo deberes.

Y con los niños pienso que hay que obrar de la misma manera. Parece un poco insensible, pero o nuestros hijos aprenden de la dureza del mundo de la mano de nuestro mirada compasiva, o tendrán que aprender con lágrimas (aveces de sangre) que un bebe no se le desconectan las pilas cuando uno no quiere que llore mas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Aunque no soy madre, me atrevo a decir que lo que hoy afecta a nuestra juventud y los precipita a las relaciones sexuales, es la falta de valores en el hogar.

Se perdió el principio de autoridad, si queremos hijos con sensibilidad, humanidad y virtudes, tenemos que comenzar por dar ejemplo. Espero no estar saliéndome del tema.

Nuestros jóvenes se están educando solos, no existe comunicación y si la hay es tergiversada.

Siempre he pensado que tener hijos es la responsabilidad más difícil, por eso decidí no tener, no estaba preparada para asumir tan importante obligación, por que éste deber es para siempre.

Hago un paréntesis, hace mucho tiempo leí en un texto una frase que me llamo mucho la atención, y reza así: “la experiencia es un billete de lotería comprado después del sorteo.”

Es la mirada que le doy a la situación, porque veo los toros desde la barrera. Pero deseo que los padres de hoy se concienticen y busquen por todos los medios, la manera de salvar el bienestar de sus hijos.

Anónimo dijo...

Buenos dias

Es cierto las personas desde pequeñas deben experimentar y entender que deben asumir los errores que se han cometido y responder por todas sus acciones. Pues asi hay mas conciencia...